Regularmente, la mayoría de nosotros (gamer de corazón) tenemos buenos recuerdos o anécdotas sobre los videojuegos, pero curiosamente me encontré esta:
Yo tenia seis cuando Goldeneye salió para el 64. Mi papa siempre convencía a mi hermana gemela de jugar con nosotros a pesar de que a ella no le gustaban los videojuegos. Como éramos chicos, mi papá insistía en que jugáramos en el modo de paint ball. Nosotros tres jugábamos por horas y horas. Cuando teníamos 8 años, mamá y papá se divorciaron. Cada vez que visitábamos a papá jugábamos Goldeneye un poco. Un día, el 15 de noviembre, cuando teníamos 9 y nos íbamos. Papá nos detuvo y me dio en la mano Goldeneye. “Los amo mucho niños”, nos dijo a Tamsin y a mi. “No olviden nunca eso. Siempre los voy amar”. |
La siguiente vez que lo vi fue dos días después, en una unidad de cuidados intensivos, después haberse colgado y cortado el mismo. Al siguiente día, ellos apagaron el aparato que lo mantenía con vida. Tamsin y yo cada año hemos buscado una forma de honrar su memoria, pero de cierto modo nunca ha sido suficiente. Normalmente yo nunca demuestro emociones sobre esto, demonios, Tamsin y yo solemos bromear mucho sobre ello. Pero recuerdo el pasado 18 de Noviembre. Desperté muy temprano y fui con mi hermana aun adormecida y la abrase. “Lo extraño”, le susurre. Ambos nos sentamos en el sillón y lloramos por horas. Después, nos levantamos, y fui a mi cuarto. Escarbé entre algunas cajas y soplé para quitarle el polvo a mi 64 y al Goldeneye. Nos sentamos en el sofá y jugamos juntos el Modo Paint ball, con un tercer jugador que no se movía en la parte inferior izquierda de la pantalla. Te amo, papá. La encontré en la red, no me consta que sea verdad , pero si lo es… es algo triste ¿no? |